Historia de la moda: la historia de la contracultura en Estados Unidos
Está claro que a lo largo de la historia la moda ha sido fundamental para establecer la identidad de una generación y consolidar movimientos políticos. Andrew Bolton, del Costume Institute del Museo Metropolitano de Arte, explica que la moda es inherentemente política porque funciona como un reflejo de la época. Los pantalones largos, por ejemplo, sirvieron como insignia de honor para los sans-culottes de clase media durante la Revolución Francesa. Mientras tanto, la ropa de oficina femenina se revolucionó durante la segunda ola del feminismo en los años 70.
Sin embargo, una de las revoluciones de moda más grandes y audaces se produjo durante el auge de la contracultura. Para comprender el impacto de este estilo de moda, aquí presentamos un breve resumen de su colorida historia.
¿Cómo empezó el movimiento contracultural?
Como sugiere su título, el movimiento contracultural surgió como una reacción a la cultura dominante y a las normas sociales desde principios de los años 60 hasta los 70. Durante este período, los periódicos y la televisión eran la principal fuente de información en los Estados Unidos. Con el tiempo, estas plataformas mediáticas se fueron fragmentando, lo que provocó reacciones polarizadas entre los estadounidenses con respecto al comercialismo, la guerra de Vietnam y las normas sociales.
Al reconocer los peligros de las ideas que prevalecían durante los años 60, la gente inició una revolución social para rechazar los valores y creencias de la generación anterior. Los hippies, uno de los grupos contraculturales más grandes de los EE. UU., promovieron la no violencia y el amor al exponer el lado feo de la guerra a través de la música. Además de eso, también protestaron contra las tendencias comerciales expresando su identidad y creencias individuales a través de la moda.
La historia de la contracultura en la moda
Los años 60: el auge de la contracultura
El movimiento de la contracultura iba en contra de las prácticas comunes de las generaciones anteriores, y puso así el foco en la juventud. Como el estilo de principios de los años 60 se basaba en la sofisticación informal,las personas celebraron la contracultura dejándose el pelo largo y estilizando su ropa a la moda bohemia. Los diseñadores, como Mary Quant, también rechazaron el estilo estructurado y entallado que promovían las casas de moda creando vestidos estilo túnica, medias de colores y gorras abullonadas. Para celebrar aún más su libertad, los estadounidenses se vestían de manera informal y usaban vaqueros, que en su día fueron el uniforme de los vaqueros y los granjeros.
Los años 80: las secuelas del movimiento
Se dice que el movimiento contracultural inicial terminó en los años 70, pero su influencia perduró hasta los 80. La gente siguió desafiando las prácticas conservadoras de los Estados Unidos de los años 80 al optar por tendencias extremas, desde la moda punk al estilo de Guns N' Roses hasta estilos andróginos y románticos como el de David Bowie.
En esta época, la gente usaba ropa llamativa con colores neón o hacía todo lo contrario, con tonos apagados que incluían gráficos y estampados clásicos. La moda también destacó la difícil situación de las tribus nativas americanas mediante la introducción de patrones inspirados en los navajos, tonos tierra llamativos y estampados geométricos.
Presente: Un posible renacimiento
Si bien sus orígenes pueden haberse remontado a medio siglo atrás, el movimiento contracultural está de moda nuevamente. Gracias al nacimiento de nuevas plataformas mediáticas, las generaciones más jóvenes están utilizando las redes sociales para promover una cultura de inclusión dentro de sus grupos de edad.
En lugar de ajustarse a las normas de género típicas, los e-boys se perforan las orejas y se pintan las uñas. Mientras tanto, las e-girls siguen los pasos de la artista musical Billie Eilish cubriéndose y vistiendo ropa holgada. Al perpetuar la idea de que está de moda ir a contracorriente, los jóvenes de hoy están recuperando el movimiento contracultural rompiendo las normas de género en la ropa y el estilo.
La contracultura es un movimiento poderoso que enseña la importancia de derribar las viejas barreras. Al adoptar ideas nuevas y radicales, los jóvenes estadounidenses pueden generar cambios inspiradores tanto en la sociedad como en la moda.
Exclusivo para grassrootscalifornia.com por Kristen Cass